Pero ya, en junio de 2015 he vuelto a disfrutar, a competir, y a lo grande, en el Aviaman, una prueba que no deja a nadie indiferente, una carrera brutal, dura, bonita, sufrida pero maravillosa por todo, organización, recorridos, ambiente y sobre todo compañerismo.

Pero voy a esta, porque la pasada ya se me había olvidado, o eso pensaba yo, y esta estaba a punto de comenzar.
La representación de Carballo era de lo más destacado, cuatro IRONMAN FINISHERS en la linea de salida, y un objetivo, finalizar, y en el menor tiempo posible, aunque eso ya era secundario.



A "putotope", buena transición y a rodar, con calma que queda mucho, cuatro puertos de montaña, dos de 2º, uno de 3º, y el Coto Xarotos de 1º categoría, culminando en el km, 33 después de 7 km de subida con rampas interminables del 20%, eso es sufrir.
Voy tranquilo, bajo con mucho cuidado, pues no paró de llover en toda la noche y el suelo está mojado y las carreteras no son las mejores para arriesgar, aunque desde que comenzó la carrera la lluvia está dando una tregua.
Sobre el km. 5, en una bajada muy peligrosa, con la calzada mojada, curva cerrada a derecha, voy con mucha prudencia y otro corredor me adelanta por el exterior, va un poco pasado y tiene que frenar o se va directo a los viñedos, frena de más, pierde el control de la bici con la mala fortuna que cae, y me cae delante, intento evitarlo, pero al tocar un poco el freno me voy también al suelo. En ese momento doy por finalizado mi Aviaman. Veo que los dos estamos bien, tengo el brazo y piernas magullados y bastantes arañazos, me duelen los dedos, pero están sanos, lo mismo que el otro corredor, así que aviso a los que vienen bajando, alguno muy pasado, es el caso de Emilio, uno de los representantes de Carballo, que se llevó un buen susto, y miro mi bici, cadena fuera, manillar desviado, freno desplazado, moral por los suelos, motivación perdida, y a esperar.
Paso unos buenos minutos y entre el otro corredor que me dice que no puedo parar, además de pedir disculpas y ayudarme a recomponer un poco la bici y que creo que puedo seguir, pues me subo a la bici y comienzo de nuevo a pedalear, queda mucho, así que hay que darle.

Subida a Xarotos, esto es un infierno, no paso de 7-8 km/h, veo alguno que se baja de la bici a falta de 3 km. para coronar, yo sufro pero sigo, me digo que después de esto ya está hecho, y casi es así, llego arriba, corono, repongo existencias en el avituallamiento y a seguir, y allí estaba Marcos Periscal esperándome para seguir a mi lado, comenzamos a bajar, juntos, intenta tirar de mi en la bajada, pero nada, en el llano voy muy bien, pero hoy no estoy para bajar, así que vuelve a irse y ya no lo veré hasta la meta, de todas formas, le estoy muy agradecido por todo y sobre todo por su amistad.
Después de Xarotos, pues ya puedo decir que comienzo a disfrutar, falta un puerto de 2º y a por la meta.



Enhorabuena a los que no tenían esta competición por haberla finalizado, y porque cada reto que os proponéis lo finalizáis con éxito.
Mención especial para mi hermano, un supercrak, unos tiempos fabulosos, una carrera estupenda, una persona brutal.
En mi primer Aviaman, dije que no volvería, en este digo que intentaré volver, me debe algo, y tengo que cobrarlo. Pero ahora toca seguir con la temporada, los entrenos van bien, las lesiones parece que olvidadas, así que pronto volveré por aquí, y volveré con una foto con estos individuos. Hasta pronto