Viajaba al Valle de Buelna acompañado de mi mujer y parte de mi familia para tomar la salida en el Medio Ironman del Valle de Buelna, del cual había escuchado maravillas en cuanto al trato al deportista, organización y todo lo demás que estas carreras llevan consigo y que tan importante es para que los triatletas se sientan a gusto y simplemente se dediquen a competir, y tengo que decir que todo los comentarios que había escuchado se ceñían a la realidad de lo que allí se vive con esta cita, desde el primer momento sientes que sólo tienes que correr y divertirte, un trato extraordinario para deportistas y acompañantes desde la recogida del dorsal hasta la churrascada final, por eso no voy hacer otra cosa que recomendar esta prueba a todo aquel que desee disfrutar de este deporte.
El Triatlón del Valle de Buelna tiene su segmento acuático en la bonita localidad de Comillas, posteriormente y tras paso por el box, se hace el segmento de bici desplazándose hasta Corrales de Buelna a unos 40 Km., y ya en Corrales se realiza la segunda parada en box, el tramo de carrera a pie, meta, entrega de trofeos, churrascada y fiesta final en las instalaciones deportivas de este pueblo.
Llegamos a Corrales el viernes 24 y después de recoger el dorsal y dejar el material para la T2, hay que descansar de la tirada kilómetrica en coche.
Todo está preparado a las 14:30 y se da la salida de los hombres, dos vueltas a un triángulo marcado con boyas, en las que la natación se hacía imposible, sin posibilidad de coger ritmo, por las continuas olas, el mar de viento que no dejaba respirar con normalidad, las continuas subidas y bajadas en pleno Cantábrico que impedian una buena visibilidad de las boyas, y finalmente tras la segunda vuelta salgo con dirección al box, miro mi crono y me sorprendo, 34' 50, pensé que iba a ser mucho peor, y al ver la clasificación, me fijo que en la general salgo en el puesto 26 del agua, de algo servirá nadar en Razo.
Hay una larga transición hasta llegar a la zona donde se encuentra la bicicleta, marcada con cintas en la playa, lo malo es que hay que correr por la arena seca. Llego para recoger mi máquina y salgo de Comillas con dirección a Corrales.
Los 90 Km. de bici son bastante duros con continuos repechos, muy rompepiernas, y dos puertos de no demasiada pendiente pero que se iban atragantando, uno sobre el Km. 30 y el otro y más duro en el 80, que sumando el viento en contra, el calor y el trazado hacían del tramo ciclista un verdadero calvario para mi, pero me estaba encontrando bastante bien, muy fuerte de cabeza, comiendo y bebiendo con asiduidad para conservar fuerzas para la carrera. Antes de dar el giro para entrar en el box y dejar la bici veo a mi afición que me anima sin parar, así que contento y a por el siguiente segmento. Si bien pretendía hacer un mejor tiempo en la bici al final no puedo más que estar contento, mi tiempo 3h 3', con una media de 29'51 km/h, y a correr, que ya estoy en Corrales.
La carrera a pie consta de una vuelta de 10 Km. por las afueras de Corrales y 5 vueltas a un circuito por el interior del pueblo, pasando en todas las ocasiones por la pista de atletismo donde se encuentra la meta. Cuando llegas al box para dejar la bici, los de la organización se encargan de recogerla, así que sólo tienes que ir a buscar las zapatillas y correr, sin preocuparte de colocar nada. Así que me pongo a correr, en la primera vuelta larga, por las afueras del pueblo, solo voy encontrándome con los de la organización que cada dos Km. y medio tienen un avituallamiento, el cual es muy necesario, bebo todo lo que puedo y voy consumiendo los geles que me quedan, adelanto a algún corredor, y algún otro me adelanta, mantengo un ritmo constante aunque no muy alto, las pulsaciones rondando las 160.
Comienzo en la pista de atletismo con las cinco vueltas al circuito por el pueblo, y lo mejor era entrar en la pista, había dos voluntarios mojando a todo aquel que quisiera con mangueras y al salir de la pista estaba el avituallamiento, isotónica, coca cola, agua y esponjas, prefería regular y paré en las cinco vueltas, vaso de isotónica, vaso de agua y esponja, y a seguir corriendo, de lo contrario sería muy difícil terminar, también era donde estaba la mayor parte de la gente animando, aunque en todo el circuito había personas del pueblo que animaban a los deportistas y en un par de sitios, en uno una niña y en otro un hombre que con una manguera refrescaban a los triatletas, de lo que estoy muy agradecido pues era muy necesario.
Lo que iba viendo a medida que seguía con mi carrera eran participantes que se retiraban, otros que iban andado, varios que por parejas se sacaban el dorsal y se marchaban caminando hacia la meta, el sol hacía estragos. Y yo continuaba corriendo para finalizar la prueba que a esas alturas era lo realmente importante, y lo conseguí, en el puesto 98 de la general con un tiempo de 5h32'38'', y en el puesto 24 en la clasificación del Campeonato de España de Policías, Bomberos y servicios de emergencias.Ahora y de vuelta a casa, toca descansar unos días y ponerse de nuevo a entrenar, el objetivo de la temporada sigue siendo clasificarme para el Campeonato de España de Larga Distancia en Ibiza y eso pasa por una buena clasificación en el Triatlón de Malvasía, el 4 de septiembre en Soria, pero de eso todo ya iré dando noticias, así como del resto de competiciones intermedias que vaya realizando, y en este momento a disfrutar de lo conseguido. Gracias.
